Una nueva forma de compartir música. ¿Cuál va a ser el efecto final de las redes P2P?, más allá de lo que suponen para quienes descargan gratuitamente decenas y decenas de canciones, las estas redes son quizá el ejemplo más claro de que las reglas en el mundo de lo digital han cambiado. Y constituyen sin duda el principal desafío para la doctrina tradicional de la propiedad intelectual.
Algo muy importante le debemos sin duda a estas redes, y no los principal su contribución técnica, sino el haber hecho que el gran público se interese por un asunto abstruso y cada día más importante: la propiedad intelectual. En un mundo hecho cada día más información, las leyes de propiedad intelectual son sin duda un instrumento de dominio, que si no son equilibradas y velan por los derechos de la sociedad en su conjunto favorecerán sólo a unos pocos.
La cuestión entonces es ¿qué va a ocurrir con las redes P2P?. Un nuevo sistema, llamado
Weed, propone una forma de intercambio diferente. Descargas una canción con DRM (es decir, que sus usos están limitados). Puedes escucharla tres veces antes de decidir si la compras o no. Si decides hacerlo conseguirás descuentos por valor de 20%, 10% y 5% por cada una de las copias que se hagan de tu canción y que decidan comprarla, (leído en
Furlog, viene de
Slashdot). El cantante de Hip-hop
Sir Mix-A-Lot ha decidido poner su último disco, Daddy's Home, a la venta en su web utilizando esta tecnología.
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La idea de Weed es radicalmente novedosa en el panorama actual. Se trata de un modelo que corre entre la postura ultraortodoxa y restrictiva de las discográficas y la postura del festín todo gratis de las redes P2P.
El sistema funciona así: Mariano pasa una canción a Lucía, esta se la pasa a Pepe, y este se la envía a Crsitina (Mariano--> Lucía--> Pepe--> Cristina). Si Cristina compra la canción el precio se reparte como sigue: un 20% va para Pepe, un 10% para Lucía y un 5% para Mariano (
gráfico). Las canciones pueden compartirse por cualquier medio, correo electrónico, en redes P2P, grabadas en CD. Un sistema de DRM asegura que se haga siempre el reparto. Sólo una pega, sólo pueden escucharse con Windows Media.
El resto del dinero va siempre el 50% para el autor, y el 15% para Weed. Un dato más, no hay un sitio central para distribuir las canciones y han comenzado a surgir muchas páginas que ofrecen música con este sistema (sus dueños se llevan un 20% por cada uno que decida comprar la canción), como
Weedfanatic.com o
Weedfilegarden.com.
La empresa, con sede en Seatttle, fue fundada a finales de 2003 por John Beezer (
entrevista con él) y tiene actualmente unos 1000 cantantes en lista.
Una nota más. La idea está basada en lo que se conoce como sistema de
supredistribución, algo de lo que ya
hemos hablado y que se formuló a principio de los noventa.